Horta Espinoza Jorge ,
Recensione: LUIS NAVARRO, Persone e soggetti nel diritto della Chiesa. Temi di diritto della persona ,
in
Antonianum, 76/4 (2001) p. 759-762
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Sommario in spagnolo:
El libro que el Profesor Luis Navarro nos ofrece en esta ocasión, desarrolla los argumentos de las personas y los sujetos en el derecho canónico a través de once capítulos ordenados progresivamente, favoreciendo sea una lectura sistemática de la obra completa que una lectura selectiva, según los argumentos que interesan al lector.
El libro puede ser dividido en tres grandes secciones. En la primera parte (capítulos 1-3) se afirma la personalidad como fundamento de todo sistema jurídico, también del derecho canónico. Un segundo grupo abraza los estados jurídicos personales en la Iglesia (capítulos 4-7), estados en los cuales cada fiel cristiano puede realizar su propia vocación personal. Finalmente, un tercer grupo se refiere a la dimensión asociativa en la Iglesia (capítulos 8-11), tanto en su dimensión pública que privada, materia que es introducida por la personalidad jurídica.
Los tres primeros capítulos sientan la base desde la cual es posible hablar y aplicar el derecho: la persona y la personalidad. El primer capítulo, “Persona e soggetto”, desde una base filosófica y positiva secular, sin excluir algunos elementos de derecho canónico, analiza la problemática ligada a la definición de la persona y el sujeto para el derecho, diferenciando la capacidad jurídica y la capacidad de actuar. Entrando directamente en el derecho canónico, con el segundo capítulo, “La persona fisica nell’ordinamento canonico”, y partiendo de la base del canon 96 que el legislador ofrece en el actual código, el autor nos introduce en la problemática de la personalidad de los individuos en la Iglesia, recibiendo y profundizando tres problemáticas de gran actualidad: la condición jurídica de los no bautizados, el catecumenado y la comunión eclesiástica, esta última bajo dos perspectivas no menos importantes, a saber, los fieles bautizados en comunidades eclesiales que no tienen la plena comunión con la Iglesia católica y los católicos que rompen o abandonan la comunión eclesiástica. Concluyendo esta presentación, el tercer capítulo, “Elementi determinanti la posizione giuridica della persona”, fundado en el Título VI del Libro de Normas Generales, evidencia las circunstancias y los elementos que inciden sobre la capacidad de actuar los propios derechos (edad, salud mental, uso de razón) y que circunscriben la vida jurídica de la persona (parentela, rito, domicilio).
El fiel cristiano, estado ontológico fundamental que une a todos los fieles en una igual dignidad por el bautismo (cfr. c. 96; 204; 208), se concreta en determinados estilos de vida: clérigos, laicos y consagrados, cada uno de ellos con un estatuto jurídico personal reconocido y tutelado por el derecho canónico vigente. Siguiendo el orden propuesto por el Legislador en el canon 207, el profesor Navarro dedica dos capítulos a los clérigos, uno a los laicos y uno a los consagrados. Los capítulos 4 y 5, Statuto giuridico personale del chierico I y II, desarrollan los aspectos relevantes de la persona del clérigo, ya no en una posición de superioridad respecto a los otros estados o en oposición a ellos, sino partiendo del encuentro mistérico que se produce entre diversidad y unidad en la Iglesia (cfr. LG 32). Una vez determinada la base doctrinal y jurídica del estado clerical (capítulo 4), enfrenta en modo detallado los derechos y deberes propios del estado en sus dos vertientes: aquellas que surgen del sacramento del orden y aquellas que se derivan del acto jurídico de la incardinación (capítulo 5). En este último capítulo, además, el autor se refiere a la delicada materia de la pérdida del estado clerical (cfr. c. 290-293).
El capítulo 6, “Condizione giuridica personale del fedele laico”, es introducido por una sintética, pero no menos profunda, presentación histórica. Siguiendo el trazado planteado por el canon 207, se adentra en dos puntos cruciales para comprender la persona del laico en la Iglesia: la bipartición y la tripartición en la cual se estructura la vida del Pueblo de Dios. El primer aspecto evidencia que el laico es un fiel distinto del clérigo, distinción que nace y se proyecta desde una realidad común: ser christifidelis. En cuanto al segundo aspecto, el Prof. Navarro analiza el rol del laico inserto en la tripartición personal de la Iglesia. Es en este universo tripartita que emergen las características configurantes de la condición laical: la secularidad. De aquí la importancia del estatuto jurídico del laico: descubrir su rol protagónico en la misión de la Iglesia y dar testimonio de su fe como ciudadano del mundo.
En el capítulo séptimo, “Condizione giuridica personale dei fedeli di vita consacrata”, el autor destaca los aspectos fundamentales que constituyen este estado de vida. El análisis del argumento se realiza en dos instancias: las normas comunes a todos los institutos de vida consagrada y, en segundo lugar, una mayor dedicación a los institutos religiosos, que poseen una mayor tradición canónica y una configuración jurídica más determinada. Termina el capítulo con una pequeña alusión a los institutos seculares.
Concluyendo el discurso sobre las personas, los últimos capítulos están dedicados ya no directamente a las personas físicas, sino a las personas jurídicas (capítulo 8), y a las asociaciones de fieles (capítulos 9 al 11). El capítulo intitulado “Le persone giuridiche nell’ordinamento canonico” (cap. 8), podría ser perfectamente considerado junto a los tres primeros capítulos de la obra que se refieren a las personas físicas. Partiendo de un análisis de confronto entre las legislaciones del 1917 y 1983, dedica un amplio espacio a definir las personas morales y jurídicas, los tipos de personas y los fines que ellas persiguen, para terminar analizando los atributos jurídico-canónicos que el código contempla.
Finalmente los últimos tres capítulos resaltan una realidad connatural al ser humano, la socialidad, que en la Iglesia se ha revelado como una constante desde los inicios de su historia. El capítulo 9, “Le associazioni dei fedeli”, abre la puerta a la comprensión de las asociaciones de fieles, con un análisis de las legislaciones de 1917 y 1983, para terminar distinguiendo las asociaciones públicas y privadas, ampliamente desarrolladas por los capítulos 10 y 11, respectivamente, bajo un esquema metodológicamente simple y lógico: constitución, gobierno, estructura jurídica, fines, miembros y relación con la autoridad jerárquica.
De una primera lectura del libro del Profesor Luis Navarro, tres son los elementos que fuertemente cautivan al lector. La primera de ellas es la honestidad y la simplicidad con la cual presenta su trabajo, el cual, de acuerdo a sus mismas palabras, es un volumen que responde principalmente a exigencias de carácter didáctico, un subsidio para los estudiantes y un valido complemento a las lecciones. Aun más, es evidente la gratitud que dirige a sus colegas, estudiantes y colaboradores de la Facultad quienes, como el mismo sostiene, lo han estimulado a realizar y publicar este trabajo. Un segundo aspecto que merece ser destacado es la contundencia y actualidad del aparato crítico, la abundante bibliografía con la cual enriquece cada uno de sus capítulos, lo cual es una gran ventaja para el lector que desee profundizar los argumentos. Finalmente, el tercer aspecto se refiere al lenguaje utilizado. Confirmando la autoridad del profesor Navarro, el vasto dominio de la materia y el carácter subsidiario del libro en el campo de la formación académica, el lenguaje utilizado tiene matices coloquiales, demostrando que la simplicidad es un instrumento valioso al servicio de un serio y dedicado trabajo científico, donde la experiencia se traduce en lenguaje escrito.
Si bien el profesor Luis Navarro advierte en la presentación que no realizará un tratado específico acerca del estatuto jurídico del fiel, en cuanto perteneciente al derecho constitucional canónico, considero que su inserción en el contexto del libro que presentamos habría dado un soporte técnico y jurídico de fundamental importancia para la comprensión de los últimos ocho capítulos, en particular aquellos referidos a los estatutos jurídicos de los clérigos, laicos y consagrados.
Junto con agradecer al Prof. Navarro la publicación de este libro, hago votos para que su divulgación favorezca la recíproca colaboración entre todos los miembros del pueblo de Dios. Es una obra que vale la pena leerla y asimilarla para descubrir y promover la fundamental igualdad que existe entre todos los miembros del pueblo de Dios, laicos, clérigos y consagrados. Especialmente dirigido al ambiente académico, este texto puede ser recomendado a todos los miembros de la Iglesia que quieran comprender el rol de las personas en la Iglesia y asumir en manera protagónica su propia condición.
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