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Recensione: R. Latourelle (a cura), «Vaticano II: bilancio e prospettive venticinque anni dopo (1962-1987) »

Para llamar la atención sobre la importancia de esta obra bastaría con decir que es el homenaje que han querido dedicar al Concilio Vati­cano II en sus bodas de plata, las instituciones universitarias de la Com­pañía de Jesús en Roma: la Universidad Gregoriana, el Instituto Bíblico y el Instituto Oriental. Y de hecho la obra se compone con las colabora­ciones de 32 especialistas, profesores en las varias especialidades de este inmenso conjunto universitario  de  los  jesuítas  en  Roma.

A este reconocimiento de la peculiaridad sobresaliente de la obra en cuanto a sus colaboradores, hay que añadir que la lectura de la misma no defrauda. Cada colaborador, en su tema específico, ofrece un balance de lo que el Concilio ha significado en los 25 años que han seguido a su celebración. Los estudios se presentan en forma muy asequible: con suficiente (pero no excesivo)  aparato de notas y de bibliografía. El objetivo que persiguen es el de examinar los resultados obtenidos en este espacio de tiempo, indicando también eventuales lagunas o puntos que necesitan mayor o mejor atención. Cada autor es un experto de los documentos conciliares; así lo documenta el índice bibliográfico final (pp. 1578-1583) con las obras y los artículos que sobre el Concilio ha publicado cada uno de los colaboradores. En la imposibilidad de señalar aquí singularmente las colaboracio­nes que en estos dos volúmenes se publican, indicamos las secciones en las que se distribuyen. El tomo I^o, después de una introducción del P. Latourelle como coordinador de toda la obra, se abre con una sección preliminar sobre el contexto histórico en el que tuvo lugar el Concilio, y sobre problemas de método; y sigue con las secciones sobre la Pa­labra de Dios, sobre la Iglesia en cuanto sacramento de salvación, y sobre la Liturgia y los Sacramentos. El tomo 2^o comprende las siguientes secciones: Iglesia e Iglesia, visión del hombre, vida consagrada, religión y religiones, problemas de formación teológica; y se cierra con una sección  específica  sobre  algunas  nuevas  perspectivas.

La obra viene a poner en evidencia la razón del P. Latourelle al ini­ciar la introducción, que precede a las colaboraciones, con esta afir­mación: « el Vaticano II representa la más vasta operación de reforma que jamás se ha realizado en la Iglesia» (p. 9). Desde luego, para advertir el cambio que el Concilio ha promovido con respecto a la men­talidad que prevalecía aun en los años inmediatamente anteriores a su celebración, nada mejor que leer y gustar la jugosa y personalísima presentación que el P. Martina hace de aquella mentalidad, sobre todo tal como en concreto se imponía en la misma Universidad Gregoriana (pp.   27-82).