Vazquez Janeiro Isaac ,
Recensione: Andrés Barcala Muñoz, Censuras inquisitoriales a las obras de P. Tam-burini y al Sínodo de Pistoya ,
in
Antonianum, 61/1 (1986) p. 196-197
.
Summary in Spanish:
La «Bibliotheca Theologica Hispana», del CSIC, sigue enriqueciéndose con monografías de alta calidad. La última, que ahora presentaremos, es debida a su mismo director, el doctor Barcala Muñoz. Las 300 páginas centrales del libro ofrecen la edición de una documentación, hasta ahora inédita y no estudiada, que se conserva en el leg. 4506 del fondo Inquisición del Archivo Histórico Nacional de Madrid; las 100 primeras páginas largas contienen el encuadre histórico-cultural de la documentación editada.
La parte documental comprende, a su vez, dos grupos de textos: el primero se refiere a las obras de Pietro Tamburini y a las actas del Sínodo de Pistoya; el segundo trata de la publicación en España de la bula «Auctorem fidei». Los documentos del primer grupo son de dos tipos, delaciones enviadas al tribunal de la inquisición y censuras pedidas por dicho tribunal a varios de sus calificadores. En total, 19 piezas de extensión y valor desigual. Blanco de las denuncias y de las consiguientes censuras inquisitoriales son en concreto los Atti e decreti del concilio diocesano di Pistoja (Firenze 1788), y las obras del teólogo de Pavía, P. Tamburini, en especial, las siguientes: De fontibus sacrae Theo-logiae deque constitutione et Índole Ecclesiae christianae eiusque regi-mine. De verbo Dei scripto et tradito (3 vols; Ticini 1789-90); Praelectiones quas habuit in Academia Ticinensi Petrus Tamburinus... (Ticini 1789). Autores de las delaciones y censuras son: José González Guerrero, el benedictino gallego y catedrático de Salamanca Veremundo Arias (dos delaciones), Manuel del SS. Sacramento (tres), José García Machado y José Vázquez, fray Antonio de la SS. Trinidad, Custodio Ramos González, varios profesores de la universidad de Salamanca (no especificados), Antonio
Miguel Yurami, Esteban Fernández Salazar, Saturio de San Serapio, José Clemot y Lara, Matías Villanuño, Manuel de San Vicente, Andrés Esteban y Gómez, Agustín García Porrero. El doctor Barcala no presenta estos personajes, ni, tal vez, lo merecen; trátase de exponentes de segunda o tercera clase de una escolástica en plena decadencia y de los lebreles de una inquisición que camina hacia sus postrimerías. Figuras de mayor relieve son los autores y destinatarios de los 21 documentos del segundo grupo que se publican aquí en forma de apéndice y que versan, como se ha dicho, sobre la bula « Auctorem fidei », promulgada en Roma el 28 de agosto de 1794 y publicada en España por real decreto sólo el 10 de diciembre de 1800. Este lance — no por frecuente menos extraño — no podía por menos de provocar intervenciones del papa, del rey, del primer ministro M. Godoy, del inquisidor general F. Lorenzana, etc., que forman el objeto de este apéndice.
La documentación ahora editada, cronológicamente, cubre el último decenio del siglo XVIII; pero la problemática que en ella se agita tenía ya una larga historia: historia tan larga como la de esos dos complejos fenómenos que son el jansenismo y el antijansenismo, de los que el episodio inquisitorial aquí documentado puede considerarse como uno de los últimos coletazos. La necesidad de enmarcar históricamente sus documentos y el deseo de evidenciar su contenido doctrinal llevaron al doctor Barcala Muñoz a presentar en amplia introducción, la historia del jansenismo y del antijansenismo, prestando, naturalmente, especial atención a sus aspectos hispanos. Por el rigor de sus conceptos teológicos, por su conocimiento de la historia y de la historiografía y, en fin, por su lenguaje preciso y conciso, hay que reconocer que el autor ha logrado dar cima satisfactoriamente a su arduo cometido.
Por tanto, el libro, tanto en su parte documental como en su parte interpretativa, es una valiosa aportación para el conocimiento de la España «ilustrada» y «europea» del siglo XVIII. Sobre ese tema no es que falten monografías, algunas con etiqueta de clásicas; entre ellas, en adelante, habrá que reservar un puesto a la obra del doctor Barcala Muñoz.
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