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Recensione: AGOSTI VITTORIO, Filosofia e religione nell'attualismo gentiliano

El libro que resefiamos constituye el primer volumen de la collección de « testi e studi » que la editorial Paideia dedica a la Filosofia de la Religión. Se abre, pues, està collección con un estudio sobre las rela-ciones entre filosofia y religión segùn Gentile.

No es que sea el primer trabajo en abordar este tema en Gentile. El mismo autor de este libro lo confirma, mas o menos indirectamente, al citar algunos trabajos en notas dispersas aqui y acullà, ya bien entrado en faena (cfr., por ejemplo, p. 15, n. 13; p. 13; p. 29, n. 30; p. 114, n. 2 età).

La obra no tiene introducción ni conclusión: se comienza (y consti­tuye el primer capitulo) por exponer las ideas matrices del actualismo en el jóven Gentile y se termina con otro capitulo (el quinto) dedicado a estudiar el teologismo y misticismo en el actualismo.

Entre estos dos capitulos se situan los otros tres, dedicados a exponer: primero, el contenido fundamental del actualismo. Segundo, a sacar las consecuencias que el actualismo comporta con respecto a la religión, esto es, la identificación de religión y filosofia en Gentile. Tercero, lo que esto significa de reductivo con respecto a las religiones que, histori-camente, han existido y existen.

Por supuesto, se prescinde de indices, de indicar organicamente bibliografia y de aquellos elementos, en general, que paralizan el libre pensar o decir, dando la impresión que està uno leyendo una obra de imaginación mas que de investigación seria.

Al leer al autor, parece que el actualismo es verdadero en si e inata-cable. Si lo es, lo accidentalmente y debido al fenòmeno de la « conser­vazione » (p. 50 s.) o porque se le somete a consideraciones desde fuera del sistema. Por otra parte, fracasa cuando se le aplica a la comprensión de algùn tema aislado, comò seria el estudio del arte, de la religión etc. (p. 51). Todo esto tendria que poner en guardia al autor del libro, pero nó: si esto lo han hecho otros (p. 263 ss.) es porque han descentrado el sistema. Me parece que un sistema que no se somete a la prueba de verdad de los otros es muy suspecto de que no sea un sistema de verdad, mas una rapsodia poética.