Larranaga Tomas ,
Recensione: T. Federici, Per conoscere Lui e la potenza della Resurrezione di Luí. Per una letlura teológica del Lezionario. II. Ciclo B ,
in
Antonianum, 66/2-3 (1991) p. 446
.
Sumario en español:
Podría parecer por el título uno de los tantos libros en uso para facilitar a los sacerdotes las homilías de las Misas dominicales y festivas. Y puede serlo; pero esta obra en realidad es mucho más que eso. El autor, seglar, es profesor de teología bíblica en la Pontificia Universidad Urbaniana, de Roma; y, como bien lo muestra en cada página, es profundo y preciso conocedor de la liturgia y de sus fuentes, tanto occidentales como orientales. Y a todo ello une un apasionado y comprometido amor de creyente por el Misterio que celebramos en toda Eucaristía: Jesús Resucitado, por el Espíritu presente en la Iglesia su Esposa, para gloria del Padre...
El mismo año 1987 había publicado, con igual título, otro volumen sobre el Ciclo A del Leccionario para las Misas dominicales. Como el subtítulo indica, el presente volumen toma en consideración el Ciclo B, con la excepción de los domingos cuaresmales: convencido de que en cada cuaresma deberían repetirse las lecturas del Ciclo A, a éstas dedica su atención también en este volumen, opción que puede discutirse una vez que ha adoptado el plan de seguir el Leccionario según sus tres Ciclos actualmente vigentes.
Toda la obra es de mucha seriedad teológica. A subrayarla, tiene una parte I muy amplia (hasta la p. 140) en que explica los principios generales que deben presidir toda celebración y particularmente la homilía, con notas introductorias también a los dos Evangelios que predominan en este Ciclo: Marcos y, mucho más limitadamente, Juan. Pero aun la parte correspondiente a cada domingo o festividad está desarrollada según esta seriedad teológica, sin concesiones a idei-tas periféricas; con notas muy sucintas, pero muy basadas en la biblia y orientadas a desvelar los auténticos valores litúrgicos, analiza el sentido de los principales elementos bíblicos de la Misa en cada domingo o solemnidad: la antífona de ingreso, el verso del Aleluya, el evangelio, la antífona de la comunión, la lectura del A.T. (la Ia), el salmo responsorial, y la lectura del «apóstol» (la 2a). Con ello se ofrece al celebrante una grande abundancia de indicaciones bíblico-litúrgicas; pero se le deja el esfuerzo personal de organizar las ideas de fondo para enfocar concretamente su celebración y, sobre todo, desarrollar su homilía.
Es una obra que requiere estudio, y promuove el estudio personal. Evidentemente, el autor tiene en muchos puntos sus ideas personales, legítimamente desde luego; pero puede chocar el tono tan categórico con el que las expone.
|